El excandidato presidencial Diego Fernández de Cevallos.
Foto: Benjamin Flores
MÉXICO, D.F. (apro).- El presidente Enrique Peña Nieto y las
autoridades competentes deben aclarar “plenamente” la compra de la
llamada “Casa Blanca” por su bien, el de su esposa y el de su familia,
aseguró el excandidato presidencial Diego Fernández de Cevallos.
“Es un asunto que no ha quedado claro a criterio de la mayoría de los
mexicanos. Como abogado no puedo juzgar la juricidad de lo que ahí se
ha dado; sencillamente, creo que el gobierno federal y las partes
involucradas pueden y deben dar explicaciones y justificaciones que el
pueblo merece”, dijo en entrevista luego de participar en un acto
público.
Con las reservas del caso al no tener el expediente a la mano, el exdirigente nacional del PAN agregó: “Si se trata de operaciones que puedan ser sospechosas o atípicas, el
gobierno, el presidente de la República lo debe aclarar plenamente. Si
él considera que ya lo hizo, es su decisión. Yo como ciudadano creo que
sigue flotando en la sociedad una inconformidad manifiesta por lo que
ahí ha sucedido”.
Aunque insistió en no mezclar su perfil de abogado –“no tengo nada
que recriminar mientras yo no conozca un expediente objetivo, jurídico
de lo que pasó”, dijo–, sostuvo que “tampoco podemos quedar con que aquí
no sucedió nada. Ojalá que todo se transparente para bien de él, de su
esposa, de su familia y de México”.
El exsenador y diputado panista asistió al Tercer Informe de
Actividades de la presidenta del Tribunal de lo Contencioso
Administrativo del Distrito Federal, Yasmín Esquivel Mossa.
Al término del acto, se refirió en entrevista al desempeño del mandatario federal a dos años de gestión.
“Juzgar dos años de gobierno no es sencillo, creo que se han hecho muchas cosas bien y muchas cosas mal”, comentó.
En el primer aspecto, destacó las “grandes reformas que se han hecho
por el presidente de la República y por el Congreso de la Unión a través
de las cuales México se abre a un mundo moderno, competitivo, que no
podemos perder ni podemos dejar pasar”.
Sobre “lo malo”, criticó que el gabinete de trabajo de Peña Nieto “se
trata de un equipo de gobierno muy cerrado, muy pequeño que no está
abierto a opiniones de personas de gran calidad, hombres y mujeres de
este país, que mucho pueden aportar, precisamente para rectificar
actitudes y comportamientos”.
Y puso como ejemplo la cancelación de la licitación del tren
México-Querétaro que, aunque no dio nombres, le correspondió al
secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza.
“Es algo que resulta todavía hoy inexplicable: Cómo se cancela un
contrato en donde han participado compañías internacionales y que los
ojos del mundo están diciendo qué es México, qué sucede aquí”.
Sobre la renuncia al PRD de Cuauhtémoc Cárdenas, su contendiente
presidencial en 1994, Diego Fernández de Cevallos, se limitó a decir:
“Me parece respetable y dolorosa. Y punto”.
“Defensores cubren a vándalos"
Sobre los hechos violentos registrados en las manifestaciones para
exigir la presentación con vida de los 43 normalistas de Ayotzinapa
desaparecidos, el panista destacó el “gran esfuerzo” del Gobierno del
Distrito Federal.
“Están haciendo ya un enorme esfuerzo, pero dentro de la complejidad
que se da en un ambiente donde a veces pseudo organizaciones defensoras
de derechos humanos cubren y protegen a los vándalos para que no trabaje
la policía”, aseguró.
El llamado ‘Jefe’ Diego” pidió distinguir entre manifestaciones y
vandalismo. “Me parece un doble crimen que después de lo sucedido en
Tlatlaya, en Iguala y muchas partes del país, ahora las protestas se
perviertan por unos cuantos que vienen a generar violencia, a generar
barbarie”.
Sin excusa ni pretexto, agregó, se deben preservar todos los derechos
de los ciudadanos, “entre ellos, el que nadie sea agredido injustamente
por la policía, pero tampoco por los vándalos”.
Acto seguido, se lanzó a defender a los policías:
“Es infame, insoportable y no debe continuar, que en este país, en
esta ciudad, en todo el territorio nacional hay unos seres humanos que
no tienen derechos humanos: Los policías, los que se supone que están
para preservar el orden y ayudarnos a que sean resguardados nuestros
derechos a la vida, a la seguridad personal, a nuestro patrimonio,
cuando intervienen y son masacrados, nadie dice nada. No hay defensores
de derechos humanos de la policía y, peor aún, cuando hacen su trabajo,
en algunas ocasiones son perseguidos”.
Se Publicó ASI